Parece que cuando empezamos a entender la manera en la que podemos consolidar nuestra asesoría, existen tantos cambios que hacer que no sabemos por dónde empezar.
La respuesta es muy sencilla. Solo hay una cosa que debes cambiar para empezar a consolidar tu asesoría, y hasta que no la cambies, ninguna otra medida surtirá efecto.
Lo que configura nuestras vidas no es lo que hacemos de vez en cuando, sino lo que hacemos de forma consistente. – Tony Robbins
Esta frase, es la revelación del cambio. Si quieres llevar tu empresa al próximo nivel, si quieres consolidar tu negocio y cumplir tus objetivos, debes empezar a cambiar las acciones que se realizan en tu asesoría y reemplazar aquellas que hasta ahora has hecho y no te han dado resultado por otras nuevas que sí lo den.
La forma más poderosa de transformar tu negocio es emprender la acción, empezar a aplicar cambios, dejar de lamentarte y enfocarte en lo primero a transformar.
Por tanto, lo primero que debes cambiar en tu empresa es… ¿preparado? Tú mismo. Sí, ¿decepcionado? Si pensabas que había un botón mágico, sigues buscando el camino corto, la aspirina, la solución rápida y sin esfuerzo.
Lo siento, del camino de espinas nadie te libra.
Y ahora la pregunta del millón: ¿por dónde empiezo a cambiarme a mí mismo? Recuerda que el orden adecuado para generar un cambio exterior es siempre SER > HACER > TENER. Es decir, que para poder tener cualquier cosa que desees, previamente has tenido que trabajar haciendo aquellas cosas necesarias para obtenerlo. Y para poder hacer las cosas adecuadas de la manera adecuada has tenido que ser de una manera determinada: hábitos que tienes, decisiones que tomas, la actitud que adoptas frente a cada desafío, etc.
Lo primero en lo que vamos a trabajar es en el SER, es decir, en nosotros mismos. ¿Has pensado alguna vez que esta o aquella situación que estás viviendo eres al primer y único ser humano al que le sucede? Te equivocas.
Prácticamente todas las situaciones a las que nos vayamos a enfrentar en la vida, es muy probable, que otra persona haya pasado previamente por ellas. Y también es muy probable que se haya parado a escribir sobre ellas. Especialmente si han sido experiencias duras a las que le ha costado encontrar solución.
Por ello, el camino para trabajar en nosotros mismos, empieza por construir una biblioteca, LEE. ¿Podrías recibir una clase de los mayores expertos en gestión empresarial? ¿Podrías recibir una clase de aquellos empresarios que han tenido éxito y que de alguna forma u otra admiras? La respuesta es sí. Lee sus libros o aquellos libros escritos sobre ellos, porque de esta manera, vas a poder coger ideas que van a empezar a cambiar tu paradigma, a adoptar una actitud diferente en las decisiones que tomas cada día y que van configurando ese HACER.
El siguiente paso para seguir moldeando nuestro SER. ¡Epa!, un momento, yo soy como soy y me tienen que querer así. Bueno, bien planteado. Pero ahora bien, si conforme ERES (SER) no haces (HACER) lo que tienes que hacer, no consigues que las cosas salgan adelante o no sabes afrontar los desafíos que se presentan, nunca conseguirás TENER lo que quieres.
Por tanto, si quieres TENER algo, y no hablo solo de cosas materiales, sino de estilo de vida, es hora de que empieces a dejar de SER tú y justificarte con ello y empezar a convertirte en la clase de persona que debes ser para TENER lo que deseas.
¿Demasiado filosófico? Bienvenido a una nueva forma de pensar. Vamos a cambiar tus mapas mentales, vamos a reescribir tu forma de ver la vida, porque así será la única forma de que sueltes el lastre que te mantiene atado a tu realidad y puedas subir de nivel.
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